Cuidado con las prácticas ESG falsas

Las acciones ESG, acrónimo que apareció en 2004 en los debates del Pacto Mundial, han ganado más espacio en las agendas corporativas, ya que tales prácticas alinean a las organizaciones con los principios de derechos humanos, anticorrupción, medio ambiente y trabajo decente. Al mismo tiempo, crecen las reflexiones sobre malas prácticas, especialmente en el ámbito ambiental, como el “Greenwashing”; la falsa política de inclusión racial, “Blackwashing”; y la falta de atención a temas relacionados con la causa LGBTQIA+, “Pinkwashing”.

Estas realidades han entrado constantemente en las exposiciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En uno de sus mensajes, emitido en abril de 2022, sobre las emisiones globales de contaminantes, el secretario general de la ONU, António Guterres, subrayó que el mundo está en una carrera contrarreloj y que no se pueden permitir movimientos lentos, falsos o lentos de ninguna forma. de  “Greenwashing”.

También según Guterres, es necesario asegurar que los compromisos de cero emisiones sean ambiciosos y fiables y cumplan con altos estándares de integridad, es decir, se necesita transparencia ambiental y reducción del déficit de credibilidad.

A su vez, las consecuencias negativas para las empresas que recurren a estas prácticas son evidentes, dado que los consumidores están cada vez más atentos a todo el proceso de un producto, especialmente en relación a la sostenibilidad que implica cada fase, y esto trae consigo una serie de penalizaciones.

En el Latin American Quality Institute (LAQI), precisamente el Modelo Latinoamericano de Excelencia (LAEM) aborda tales temas en su alcance general, pues brinda a las empresas un modelo organizacional ideal que promueve acciones basadas en buenas prácticas corporativas, continuas mejora de procesos y responsabilidad social.

Referencias

https://news.un.org/pt/story/2022/04/1787692

https://www.laqualityinstitute.org/laem.php