EL LIDERAZGO ADAPTACIONAL A LA VANGUARDIA
El
mundo actual nos obliga a diseñar estrategias innovadoras que nos preparen para
enfrentar los nuevos retos y salir de la famosa “zona de confort”, que la
mayoría de las veces nos impide dar más y lograr mejores cosas.
Conscientes
de que depende de nosotros el sentido que le demos a los sucesos que se nos
presentan cada día, los emprendedores y los empresarios deben cultivar con
mucho empeño su liderazgo, un tema, que para algunos puede ser algo ya muy
visto y hablado y para otros un nuevo descubrimiento.
A
lo largo de la historia mucho se ha hablado sobre el liderazgo, incluso para
tratar de resolver la interrogante de si “nace” o “se hace”, lo que nos ha
llevado a que se estudien diferentes estilos de liderazgo, hoy abordaremos este
apasionante tema y una propuesta de cómo poder aprovechar lo mejor de cada
estilo y adaptarlo a las situaciones que estamos viviendo.
Comencemos
por algunas de las teorías del liderazgo…
1.
Teoría
X. Propuesta por Douglas McGregor, habla de que al ser humano nos le gusta
trabajar y que lo evitará siempre que pueda, por ello se tiene que usar el
control, las amenazas y hasta los castigos si se quieren lograr resultados.
Indica también que los colaboradores requieren dirección.
2.
Teoría
Y. Propuesta por el mismo autor pero con un enfoque distinto que considera que
al ser humano no le disgusta trabajar y que es capaz de dirigirse y controlarse
a si mismo. Considera también que las personas tienen una alta capacidad para
desarrollar imaginación, ingenio y creatividad.
3.
Teoría
del Grid Gerencial. Propuesta por Blake y Mouton, a través de un radar
bidimensional, que considera la orientación a resultados y la orientación al
empleado. Este radar muestra que los estilos de liderazgo pueden variar a
partir de la orientación que el líder tiene hacia lograr resultados o hacia el
propio colaborador.
4.
Teoría
de Likert. Esta propuesta parte de 4 estilos: autoritario-explotador,
autoritario pero paternal, consultivo con derecho a tener la última palabra,
participativo-democrático.
5.
Liderazgo
situacional. Este es uno de los modelos más seguidos, fue propuesto por Hersey
y Blanchard. Sugiere considerar dos variables críticas en el comportamiento del
líder: la cantidad de dirección y la cantidad de apoyo socioemocional que el
líder proporciona a partir del nivel de madurez de los colaboradores.
Seguramente
mientras lees te han llegado pensamientos acerca de situaciones en los que has
vivido todas las teorías, ¿verdad?, y entonces, nos surge la duda, ¿Qué tipo de
líder soy? ¿Qué tipo de líder es mi jefe?. Justo por esta razón es que el
liderazgo situacional es uno de los más aceptados, ya que considera que un
líder se puede comportar de una manera o de otra dependiendo de la situación en
la que se encuentra.
Hoy
te quiero hablar de una nueva propuesta que he llamado liderazgo adaptacional,
que es un derivado del situacional pero que considera también las condiciones
que se están presentando en el equipo de trabajo, esto permite que el líder no
solo aplique un estilo de liderazgo en función del nivel de madurez de los
colaboradores y que a partir de eso establezca que tanto dirige y que tanto
apoya emocionalmente; sino que también adapte su estilo de liderazgo a partir
de las condiciones que se están viviendo, que aunque sean externas al equipo de
trabajo influyen directa o indirectamente en el ánimo del equipo e incluso en
la respuesta a los estímulos del líder.
Rosalinda Pizarro |
Otra
característica muy importante de este estilo de liderazgo es que uno de los
rasgos que distinguen a un líder, es justamente la adaptación al cambio. Esto
implica una respuesta muy rápida del líder para él adaptarse al cambio y para
poder transmitir a todo su equipo esa adaptación al cambio de acuerdo a las
características de su entorno. Y aquí aplica una frase que dice “la palabra
ilustra pero el ejemplo arrastra”.
¿Qué
te parece si hacemos un resumen de las
características del líder adaptacional?:
· Tiene como fortaleza
una capacidad de adaptación al cambio muy rápida.
· Puede transmitir a
sus colaboradores esa facilidad de adaptabilidad con una adecuada guía y
dirección.
· Tiene visión para
poder identificar situaciones y condiciones futuras que deba enfrentar con su
equipo de trabajo para irse preparando de forma oportuna.
· Lo identifica su
amor por el aprendizaje lo que lo hace investigar y contar con información que
le sea de utilidad para su proceso de adaptación.
· Tiene una autoestima
sólida y un espíritu fuerte que le permite salir victorioso de situaciones
adversas y lo transmite a su equipo.
· Actúa con optimismo
y esperanza ante situaciones de incertidumbre, inestabilidad y complejidad, es
decir, mantiene “la cabeza fría”.
· Es capaz de
reinventarse a si mismo y a su equipo en momentos de crisis si se requiere.
· Guía a su equipo
hacia un puerto seguro y mantiene la ecuanimidad y la serenidad lo que permite
que el equipo aporte aún en condiciones complejas.
· No se conforma con
la estabilidad permanente, busca nuevos retos.
En
estos momentos de muchos cambios no solo en Latinoamérica sino en el mundo, el
papel de los líderes es vital, es lo que nos permitirá trabajar en equipo,
fortalecer los desempeños grupales y permitir el surgimiento de nuevos
liderazgos, liderazgos en todos los aspectos de la vida.
Y si
tú te preguntas en este momento…. ¿Cómo lo aplico en mi vida si yo no tengo un
equipo a mi cargo?, la respuesta es muy fácil, tomemos cada uno de nosotros el
liderazgo de NUESTRA VIDA, un liderazgo adaptacional que nos permita resurgir,
con, sin y a pesar de las circunstancias, ese liderazgo que nos permita lograr
nuestros más grandes anhelos, enfrentando los retos que seguramente se nos
presentarán y llevando un mensaje de optimismo a los que nos rodean. Siendo
líder de mi propio destino con certeza llegaremos al mejor puerto.
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