Mitigación del trabajo infantil
Grave violación de los derechos humanos, el trabajo infantil es ilegal y priva a los niños, niñas y adolescentes de una niñez normal, impidiéndoles no sólo estudiar con normalidad, sino desarrollar, de manera saludable, todas sus capacidades y habilidades.
Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el trabajo infantil es a menudo la causa y el efecto de la pobreza y la falta de oportunidades para desarrollar habilidades. Como resultado, el nivel de desarrollo de las naciones se ve afectado y muchas veces termina llevando el trabajo forzoso a la edad adulta.
Datos de la OIT indican que 160 millones de niños, niñas y adolescentes entre 5 y 17 años fueron víctimas del trabajo infantil -97 millones de niños y 63 millones de niñas- en 2020. Es decir, uno de cada 10 niños y adolescentes en todo el mundo estuvo en una situación de trabajo infantil.
En todos los grupos de edad, la participación en el trabajo infantil es mayor para los niños que para las niñas. Entre todos los niños, el 11,2% está en trabajo infantil en comparación con el 7,8% entre todas las niñas. En términos absolutos, los niños en trabajo infantil superan en número a las niñas en 34 millones.
La pandemia de Covid-19 ha traído la amenaza de empeorar aún más el progreso mundial contra el trabajo infantil. Con este fin, la OIT refuerza la necesidad de medidas de mitigación urgentes. En este, un nuevo análisis sugiere que más de 8,9 millones de niños, niñas y adolescentes estarán en situación de trabajo infantil a fines de 2022, como resultado del aumento de la pobreza impulsado por la pandemia.
En respuesta, se invita al sector empresarial a “no quedarse quieto” e invertir para facilitar el desarrollo rural y promover el trabajo digno en el sector agrícola. La OIT sostiene que este es un momento crucial y los resultados dependerán en gran medida de las respuestas frente a esta realidad.
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